04 enero 2012

Giovanni Battista Pergolesi


El 4 de enero de 1710 nació en Iesi el compositor, violinista y organista italiano del período Barroco Giovanni Battista Draghi, llamado Pergolesi. Su obra influyó profundamente en la escuela napolitana, y sirvió como prototipo por antonomasia de la ópera italiana. Confrontaría el gusto estético derivado de la tradición de la ópera seria francesa y el de los partidarios de la nueva ópera bufa italiana.

Estudió música en Iesi con Francesco Santini, y luego viajó a Nápoles, donde estudió a partir de 1735 con Gaetano Greco y Francesco Feo entre otros. Pasó gran parte de su vida en el entorno de la corte de Nápoles, al servicio de aristócratas como los príncipes de Stigliano y el duque Marzio IV Maddaloni Carafa . Aunque nunca abandonó la península italiana, su fama como compositor de óperas italianas se extendió pronto. Su obra influyó profundamente en la escuela napolitana, y sirvió como prototipo por antonomasia de la ópera italiana.

En 1746 se estrenó en París sin gran repercusión su obra más famosa, “La serva padrona” (1733) III (I Barocchisti, Violín: Duilio Galfetti & Diego Fasolis). Sin embargo, el reestreno en París “La Serva Padrona” (La Criada Señora) fue el centro de las polémicas conocidas como "La Querella de los Bufones" mantenidas en París en 1752, entre los defensores de la tradición lírica francesa y los partidarios de los "bufos italianos", a la cabeza de los cuales se hallaba Juan Jacobo Rousseau y los enciclopedistas, que consideraron a la obra de Pergolesi como un emblema libertario opuesto al absolutismo real representado por la "Tragedie Lyrique".

La importancia de La Serva Padrona no sólo radica en su gran calidad, sino en que abre el camino a la Ópera Bufa que con sucesivas alteraciones ha llegado hasta nuestros días, relegando para la historia a la llamada Ópera Seria. En esta obra encontramos por vez primera el papel de la "Soubrette" es decir, una ingeniosa sirvienta más astuta que su amo. Las melodías de Pergolesi, bellas y de un claro fraseo, contribuyeron a crear el estilo preclásico.
Pergolesi murió a los 26 años, aparentemente de tuberculosis, en Pozzuoli el 16 de marzo de 1736. Tras su muerte su música se hizo tan popular que los editores acabaron atribuyéndole muchas obras de otros compositores. En 1919 Ígor Strawinski basó su ballet Pulcinella (París, 1920) en la obra de Pergolesi.


Obras
Pergolesi fue uno de los más importantes compositores de la "opera bufa" temprana (ópera cómica). Su ópera seria “Il prigioner superbo” incluye un segundo acto cómico, Intermezzo, la Serva Padrona , (La Campesina o La criada patrona) (1733) I, II, III (I Barocchisti, Violín: Duilio Galfetti & Diego Fasolis), que se ha convertido en una pieza muy popular por derecho propio.

Entre otras obras operísticas se encuentran "La conversión y muerte de San Guillermo" (1731), “Lo frate 'nnamorato” (El hermano enamorado) (1732) (Orchestra e Coro del Teatro alla Scala di Milano), considerada su ópera más importante,  “Adriano en Siria" (1734) (Accademia Bizantina & dir. Ottavio Dantone), “L'Olimpiade” (1735) (Accademia Bizantina & dir. Ottavio Dantone),  "Il Flaminio" (1735) (Accademia Bizantina & dir. Ottavio Dantone) y “Achille in Sciro”, todas ellas estrenadas en Nápoles, salvo "L'Olimpiade" que lo fue en Roma.

Pergolesi también escribió música sacra, incluyendo una Misa en Fa mayor (Messa Sant Emidio Missa Romana) (dir. Rinaldo Alessandrini) o su “Magnificat” (The Academy of St Martin in the Fields & The Choir of Kings College Cambridge).
Su obra de este estilo más conocida es, sin duda, su "Stabat Mater", para soprano, contralto y orquesta (1736)  (Philippe Jaroussky, countertenor / Emöke Barath, soprano/ Nathalie Stutzmann, dir. &/ Orfeo 55). Fue elegida como reemplazo de la escrita por Alessandro Scarlatti para las representaciones del Viernes de Dolores, en Nápoles.

La obra ha permanecido popular, convirtiéndose en la más editada e impresa del siglo XVIII, y arreglada o adaptada por un gran número de otros compositores, incluyendo a Johann Sebastian Bach, que la usó como base de su Salmo "Tilge, Höchster, meine Sünden", BWV 1083I (Barocchisti & dir. Diego Fasolis). Asimismo, Pergolesi compuso numerosas obras seculares, incluyendo una Sonata (Silva Manfrè, órgano), un Concierto para violín, cuerdas y bajo continuo en Si bemol mayor (Pina Carmirelli & I Musici) y un Concierto para flauta y dos violines en sol mayor (Peter-Lukas Graf, Orchestra da Camera di Padova e del Veneto & Bruno Giuranna).

El Stabat Mater es un poema latino en forma de secuencia compuesto por un fraile franciscano en el siglo XIII. En poco tiempo se convirtió en una de las plegarias devocionales más populares y llegó, por último, a ser admitida en el oficio de la Iglesia Católica, como la secuencia propia de la Virgen de los Dolores. Durante muchos siglos el Stabat Mater ha venido siendo motivo inspirador para los compositores. Palestrina, Scarlatti, Pergolesi, Haydn, Rossini, Perosi, entre otros muchos, han puesto en música la bella secuencia medieval, en obras de alto valor artístico. El Stabat Mater de Pergolesi es uno de los más célebres por su originalidad y su gran belleza. Fue compuesto cuando Pergolesi se hallaba ya al borde del sepulcro y en lamentable estado de pobreza y abandono. Está escrito para soprano, contralto y coro, con acompañamiento de orquesta de cuerdas y clavecín. La primera parte está cantada por el coro y se refiere únicamente a la primera estrofa, cuya traducción libre, en verso, dice así:

Stabat mater dolorosa
Juxta crucem lacrimosa,
Dum pendabat Filius
Estaba la madre dolorosa
llorando junto a la cruz
de la que colgaba su Hijo

En razón de que su autor fue un "puente" histórico, el Stabat Mater de Pergolesi muestra una curiosa mezcla de estilos. La obra se inicia con un movimiento marcadamente expresivo -Stabat Mater- en el antiguo estilo barroco. Pergolesi le pone fin en el mismo estilo con un conmovedor y contrapuntístico coro de "Amén". Pero su afinidad con la ópera cómica se hace evidente en el carácter de movimientos tales como el dúo "Quando Corpus", Nº 12, y las arias "Quae moerebat", Nº 4, y "Eia Mater", Nº 7, realmente operísticas. Mientras el Nº 8, "Fac ut ardeat", apunta al Barroco, "O quam tristis", Nº 3 tiene la misma atmósfera de la música sacra de Mozart, con sus delicados adornos armónicos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario