El sábado 5 de julio de 1969 se celebró en el Hyde Park londinense un concierto gratuito cuyo cartel encabezaban los Rolling Stones. Además participaban otros grupos británicos como Third Ear Band, King Crimson, Screw, Family y Alexis Korner's New Curch. Era la primera actuación en vivo de los Stones en más de dos años y se preparó para presentar al nuevo guitarrista de la banda, Mick Taylor. Sin embargo, la muerte dos días antes de Brian Jones, cambió por completo el sentido del concierto, convirtiéndose en un homenaje al ex Stone desaparecido.
La noche del viernes ya se habían congregado cientos de fans con velas encendidas y a la mañana siguiente, sobre las once, las estimaciones de la policía cifraban en 20.000 los asistentes. En total, llegaron a reunirse alrededor de 300.000 personas de las cuales, únicamente 75.000 pudieron ver a los músicos en el escenario.
Hacía calor ese día y muchos acabaron refrescándose en el lago Serpentine. Asimismo se vendieron todos los helados y bebidas de los puestos ambulantes. La gente tocaba guitarras y tam-tams mientras se arremolinaban en el parque ataviados con collares, brazaletes y joyas; un auténtico paraíso hippy.
Aunque se recuerda el concierto como un hecho memorable de la historia del rock, también existe unanimidad en considerar la actuación de los Stones de aquella tarde una de las peores de su carrera. Las guitarras estaban desafinadas y se notaban los dos años que la banda llevaba sin tocar en directo. Keith Richards: "Tocamos bastante mal ya que llevábamos años sin hacerlo juntos en un escenario. Pero a nadie le importó porque lo que quería la gente era vernos tocar de nuevo".
La actuación de los Stones se grabó por el canal Granada Television y se encuentra editada en DVD y Blu-ray. Al finalizar el concierto se le ofreció a los que recogieran tres sacos de basura una copia gratis del nuevo single de los Rolling Stones, 'Honky tonk women', publicado el día anterior. Aquel sábado, acabado el festival, Hyde Park terminó más limpio de lo habitual.