El 17 de agosto de 1959 se publicó el álbum 'Kind of Blue' del trompetista Miles Davis, considerado por numerosos críticos de jazz la auténtica obra maestra del músico de Alton (Illinois). La influencia de este álbum en la música en general, tanto en jazz, como en rock y música clásica ha llevado a muchos a nombrarlo uno de los más influyentes trabajos musicales de todos los tiempos.
A finales de 1958 Miles lideraba una de las mejores bandas de hard bop del país. La componían el saxofonista alto Cannonball Adderley, el tenor John Coltrane, el pianista Bill Evans, el bajista Paul Chambers y el baterista Jimmy Cobb. Tocaban una selección de standards del pop y originales bebop de Charlie Parker, Thelonious Monk, Dizzy Gillespie y Tadd Dameron. Como en todo jazz basado en el bebop, las bandas de Davis improvisaban sobre las progresiones armónicas de los acordes de cada tema. Davis fue uno de muchos músicos de jazz que comenzaban a sentirse insatisfechos con el estilo, y consideraban las cada vez más complejas progresiones de acordes un obstáculo a su creatividad.
En 1953 el pianista George Russell había publicado su obra 'Lydian chromatic concept of tonal organization', que ofrecía una alternativa a la práctica de la improvisación basada en acordes y sus progresiones. Abandonando la tradicional fórmula de acordes menores y mayores de la música clásica, Russel desarrolló una nueva fórmula usando escalas o series de escalas para las improvisaciones. Miles ya había aplicado las teorías 'modales' de Russell en el tema que dio título a su álbum 'Milestones' (1958). Tras las primeras sesiones de Davis con Bill Evans, antiguo alumno de Russell, el trompetista se mostró satisfecho con los resultados y decidió grabar un álbum completo basado en las nuevas 'formas modales'. Para entonces, Bill Evans había abandonado el sexteto para iniciar su carrera en solitario y fue reemplazado por el jamaicano Wynton Kelly, pero Miles le pidió que volviera a la banda para el proyecto 'Kind of Blue'.
Como era costumbre en Davis, prácticamente no hubo ensayos previos y los músicos tenían una idea muy vaga de lo que se iba a grabar aquellas dos tardes de primavera (2 de marzo y 22 de abril) en los estudios de 30th Street en Nueva York bajo producción de Teo Macero. Como bien describe Bill Evans en las notas de la cubierta del disco, Davis le había dado a cada músico unos esquemas de escalas y líneas melódicas sobre las que improvisar y una vez ensamblados, Miles les dio una breves instrucciones en cada pieza y se pasaba directamente a grabar la toma.
Con tan poca preparación, los resultados fueron tan satisfactorios que se generó la leyenda de que todas las piezas del álbum fueron grabadas en una sola toma. En realidad, únicamente 'Flamenco sketches' no precisó de repeticiones. Davis, consciente del ego herido de Wynton Kelly, el pianista sustituto de Bill Evans a quien Kelly veía con disgusto ocupar de nuevo su plaza, le eligió a él como pianista en la grabación de 'Freddie freeloader', un tema más enraizado en el blues.
La recepción del álbum fue apoteósica y está considerado desde entonces una obra cumbre, no solo de Miles, sino del jazz y la historia de la música en general. Sin embargo, el trompetista en una entrevista de 1986, tras su etapa eléctrica renegaba de trabajos anteriores como 'Birth of the Cool' y 'Kind of Blue' y dudaba de la conveniencia de permanecer fiel a un estilo: "'So What' y 'Kind of Blue' fueron concebidos en aquel momento, la hora y el dia precisos y ya pasó. Se acabó. (...) Lo que solía tocar con Bill Evans, aquellos tonos modales y acordes sustitutivos... poseíamos la energía entonces y nos gustaba. Pero actualmente no siento ningún placer tocándolo. Es como pavo recalentado."