El 24 de octubre de 1927 nació en Toulon (Francia) el cantante francés Gilbert Bécaud. Apodado 'Monsieur 100.000 volts' por su dinámica presencia escénica, Bécaud fue uno de los cantantes franceses más populares de los años cincuenta y sesenta y disfrutó de una carrera musical que se extendió más de cuatro décadas. Conocido por su éxito 'Et maintenant' de 1961, también fue actor ocasional, autor de casi 400 canciones y un ambicioso compositor, completando una cantata de Navidad, una ópera y un musical de Broadway. Pero su mayor impacto lo logró como cantante. En una época en la que los cantantes de cabaret mantenían una postura inamovible en escena, las enérgicas y entusiastas actuaciones de Bécaud llevaban a sus audiencias a un estado frenético. Se convirtió en una presencia habitual del Olympia de Paris, donde llegó a actuar en 30 ocasiones, más que ningún otro artista.
Nacido como François Gilbert Léopold Silly en el puerto mediterráneo de Toulon, desarrolló pronto su talento con el piano y con nueve años ya estaba estudiando en el Conservatorio de Niza. Su educación se vió interrumpida por la Segunda Guerra Mundial y dejó la escuela en 1942 para reunirse con su familia en Albertville y colaborar con la Resistencia francesa. Tras la guerra, su familia se instaló en Paris y el joven Gilbert realiza sus primeras actuaciones en night-clubs y cabarets. Por la misma época, comenzó a componer música para películas bajo el nombre de François Bécaud y conoció al también compositor Maurice Vidalin quien le animó a escribir canciones pop con el estilo tradicional de chanson. En 1948 Gilbert escribe temas para la cantante Marie Bizet, a través de la cual, el músico conoce a Pierre Delanoé, quien junto a Bécaud y Vidalin formaría una fructífera asociación creativa.
En 1950, Gilbert es contratado como pianista para acompañar al cantante Jacques Pills. Durante una gira por Estados Unidos, ambos coinciden con Edith Piaf y le componen la canción 'Je t'ai dans le peau'. Pills y Piaf se casan y Bécaud fue el pianista y mánager de Edith Piaf por un breve tiempo. En 1952 cambió su nombre artístico al definitivo Gilbert Bécaud, realizó su debut como cantante, contrajo matrimonio y escribió canciones en colaboración con Louis Amade y un joven Charles Aznavour. Gracias en parte a las influencias de Piaf, Bécaud logró grabar sus primeros singles, 'Mes maines' y 'Les croix' en 1953. Los temas, escritos por Delancé y Amade, respectivamente, ayudaron a Gilbert a establecerse como un artista prometedor de la escena musical francesa
En 1954 realizó su primera aparición en el Olympia como telonero, la noche de su reapertura. Volvió como cabeza de cartel al año siguiente y ofreció un show tan electrizante que produjo que las adolescentes se volvieran locas y comenzaran a destrozar las butacas del teatro. La prensa francesa le puso el apodo de 'Monsieur 100.000 volts' y la publicidad le catapultó a la primera línea de los cantantes franceses, Bécaud publico numerosos hits durante los años cincuenta incluyendo 'La corrida' (1956), 'Les marchés de Provence' (1957), 'Le jour où la pluie viendra' (1957 co-escrita con Delanoé) y 'C'est Merveilleux l'Amour' (1958), entre otros. Adicionalmente, 'Le jour où la pluie viendra' fue adaptada al inglés como 'The day the rains came', un éxito en las listas inglesas para Jane Morgan en 1958.
Fue el primero de varios temas escritos por Bécaud que lograron un gran éxito en versión inglesa y Gilbert consolidó su creciente reputación con largas giras internacionales. Durante este periodo Bécaud tambien actuó en el cine apareciendo por primera vez en la película 'Le pays d'où je viens' (1956) a la que seguirían 'Casino de Paris' (1957) y 'Croquemitoufle' (1959).
En 1960 el cantante ganó el prestigioso premio de Grand Prix du Disque y compuso una extensa obra clásica navideña, una cantata titulada 'L'enfant à l'etoile', estrenada en Nochebuena en una iglesia parisina ante las cámaras de TV. Otro de sus grandes éxitos fue 'Je t'appartiens', que llegó a ser un Top10 en las listas estadounidenses en su versión inglesa, 'Let it be me', cantada por los Everly Brothers. Este tema recibiría innumerables versiones, entre ellas las de James Brown, Jerry Butler, Willie Nelson, Elvis Presley, Bob Dylan y Nina Simone.
El mayor hit de su carrera llegó en 1961 con 'Et maintenant', un tema co-escrito con Pierre Delanoé que se convertiría en uno delos grandes clásicos de la música popular francesa. Traducida al inglés como 'What now my love' también se convirtió en un standard en Estados Unidos e Inglaterra, recibiendo versiones de Shirley Bassey, Sonny & Cher, Frank Sinatra, Elvis Presley y Andy Williams, entre muchos otros. El año 1962 completó una ópera, 'L'Opera d'Aran' parte 1, parte 2, que se estrenó en Paris en octubre de ese año, con dirección de Georges Prêtre. Pasó buena parte de 1964 realizando giras presentando su obra.
Mientras tanto, seguían produciéndose los éxitos pop: 'Un dimanche à Orly' (1963), el enorme éxito 'Nathalie' (1964) probablemente su segunda canción más conocida, 'Quand il est mort le poète' (1965), el controvertido tema pro-De Gaulle 'Tu le regretteras' (1965) y 'L'important c'est le rose' (1967). Otro de sus éxitos de esos años, 'Seul sur son étoile' fue adaptada al inglés, resultando un Top5 en las listas americanas como 'It must be him' cantado por Vikki Carr.
Bécaud continuó con sus extensas giras por todo el mundo y a finales de los años sesenta apareció en numerosas ocasiones en la TV francesa. La corbata a lunares y su mano en el oído son imágenes que marcaron su estilo. Aquella corbata era para él un amuleto porque tenía su historia:
Gilbert había estudiado piano y joven aún, buscaba trabajo. Al presentarse en un piano-bar intentado lograr un empleo, el dueño del bar -que solicitaba un pianista-, le dijo que era imposible teniendo en cuenta que la imagen de etiqueta de su establecimiento requería el uso de corbata y él no llevaba. Como iba acompañado de su madre -quien llevaba un vestido azul a lunares- ella misma arrancó el olan de su vestido para confeccionarle de manera improvisada una corbata a su hijo, quien regresó al bar, donde fue inmediatamente contratado. Después de aquel dìa, Gilbert se presentó siempre usando una corbata con lunares.
Otra de sus manías era aparecer en escena siempre con el mismo piano, que poseía una particularidad: estaba ligeramente inclinado. Efectivamente, Gilbert estaba siempre dispuesto a observar la sala mientras estaba sentado al piano y para ello le solicitó a Jaques Dinnat (su escenógrafo) que cortase uno de los tres pies del instrumento a fin de darle cierta inclinación necesaria, lo que fue efectuado por un artesano parisino. Esta inclinación apenas perceptible a la vista, era suficiente para obtener el resultado deseado. Sin que ello afectara su interpretación o la del pianista que lo acompañaba regularmente, Gilbert Sigrist.
Durante los años setenta Bécaud se centró más en las actuaciones que en las grabaciones, aunque siguió colocando canciones en las listas francesas a pesar de los gustos cambiantes de la época. En 1970 tuvo otro hit con 'La solitude, ça n'existe pas' y retornó brevemente a su carrera de actor apareciendo en los films 'Un homme lobre' de Roberto Muller y 'Toute une vie' de Claude Lelouch. A finales del año 1973 tuvo que tomarse un descanso y en este punto de su carrera su larga adicción al tabaco comenzó a pasarle factura en la voz. Sin embargo volvió a los escenarios en 1974, manteniendo una apretada agenda de actuaciones. Ese mismo año fue nombrado Caballero de la Legión de Honor y en 1975 logró su único hit en el Reino Unido con 'A little love and understanding', versión inglesa de 'Un peu d'amour et d'amitie'.
Colaboró con Pierre Grosz en 1976, componiendo 'Mais où sont-ils les jours heureux?' y en 1977 obtuvo otro éxito con 'L'indifference' escrita con su colaborador habitual Maurice Vidalin. Tras otro periodo de inactividad a finales de los setenta, Bécaud co-escribió con Neil Diamond los éxitos 'September Morn' (1980) y 'Love on the rocks' (1981), revitalizando además su propia carrera discográfica con el hit de 1982 'Desirée'. Cuatro años después se estrenó en Estados Unidos su musical 'Madame Roza', teniendo allí más éxito del que obtuvo en Francia. En 1988 Bécaud cambió de sello y firmó con BMG, donde publicó ese mismo año el álbum 'Fais-Moi Signe'.
Tras la muerte de su madre en 1991, se embarcó en una gira alrededor del mundo y contempló la idea de retirarse. Antes, sin embargo, en 1993, publicó su álbum autobiográfico, 'Un Vie Comme un Roman'. Los siguientes años los pasó descansando y cuidando su salud en residencias diferentes, incluyendo una casa flotante en el Sena. No obstante, continuó escribiendo canciones y volvió al estudio en 1996 para grabar el álbum 'Ensemble'. Al año siguiente celebró su 70 cumpleaños con otra serie de triunfales conciertos en el Olympia y en 1999 publicó el álbum 'Faut Faire Avec...'. Realizó su última aparición en directo en Suiza el mes de julio del año 2000 y seguidamente entró en el estudio para grabar lo que sería su última obra, 'Le Cap'. Murió en su casa flotante del Sena el 18 de diciembre de 2001.